La comilona

No se cuantos kilos he subido este fin de semana largo... por lo menos uno. Y es que me gusta golosear. Si veo algo que me gusta, me lo como aunque fisicamente no haya mas espacio en mi estomago.
El jueves, en casa de Victoria celebramos el Thanksgiving. El pavo estaba delicioso, pero mi perdicion fue el tiramisu que trajeron de postre. Me habia comportado como una señorita durante la cena y a pesar de que mi estomago decia que no cabia mas, me comi una porcionzota de tiramisu. Y de alli me empece a sentir mal... sentia que mi estomago iba a estallar! Como sera, que me fui a caminar un rato (a pesar del frio que hacia), para sentir que por lo menos todo volvia a su lugar.
El viernes seguimos comiendo: solo prepare una lasagna para unos amigos, pero aparecio una torta extra de postre... y debo reconocer que cada vez que paso por la cocina la torta tiene un pedacito menos.
Y hoy llueve afuera... y justo tengo un zapallo grandote en casa.... asi que quedo de lujos unos porotos con riendas y en la tarde sopaipillas...
Y claro, mañana no me cerrara el pantalon.

Ahhh, y por fin compramos por internet nuestra camarita... espero que llegue pronto!